¿Qué es Sumika Loves...?

Sumika Loves es un Fan Fiction Yuri hecho por Daniel Santos Delgado; está basado en el anime de Sasameki Koto (anime, no manga), en el cual han transcurrido 4 años después de los acontecimientos del último capítulo de la serie. Si ésta es la primera vez que visitas esta página, te recomiendo hacer clic en el Índice de capítulos, y empezar desde el primer capítulo.

Capítulo 2: Visitas

Sumika estaba en el cuarto de baño, cogía un frasco de colonia normal y se puso un poco en el pelo. Después dejaba el frasco en su sitio, cogió su peine y peinó su pelo de forma que toda la colonia echada en el pelo se esparciera en el mismo.

Salía del cuarto de baño y se dirigía a su habitación, una vez allí, se cambiaba de pantalones por unos vaqueros azules porque si recibe a sus amigas con los pantalones sencillos parecería que estuviese vistiendo un pijama, y Sumika quería dejar una buena impresión hacia Kazama y sus amigas... sobre todo hacia Kazama.

Hecho esto, Sumika pensaba que se le estaba olvidando algo... Ponerse un poco de desodorante en las axilas, porque estaba fuera de casa durante varias horas seguidas. Se dirigió hacia el cuarto de baño, se quitó su camiseta, y una vez allí cogió el espray de desodorante y lo aplicó debidamente a sus axilas.

“Mejor me cambio de camiseta. El sudor que había llevado al llegar a casa habrá mojado la camiseta que llevaba antes.”

Sumika cogía la camiseta blanca que llevaba antes y lo dejó en el cesto de la ropa para lavar. Salió del cuarto de baño, entró en su habitación y buscaba en su armario una camiseta adecuada... Eligió una camiseta azul celeste, porque -dejando aparte de no tener una camiseta mejor para la ocasión- hacía juego con los pantalones vaqueros azules que estaba llevando. Sumika se puso la camiseta azul celeste.

Después, Sumika había decidido echar un vistazo en el patio cerca de la entrada de casa para ver si llegaba Azusa. Salió de la habitación, caminó hacia la entrada de su casa, abrió la puerta y salió de casa. Se alejaba un poco de la casa hasta el punto de estar al lado de la calle, a ver si podía ver a Azusa. Miró a un lado y vio en la lejanía que Azusa la estaba saludando agitando la mano y contenta; Sumika le devolvió el saludo sonriendo y levantando la mano.

Azusa llevaba vestida una camiseta verde oscura, un pantalón vaquero y zapatos normales negros. Seguía conservando sus mismos listones en su cabello. Parecía que su forma de vestir era igual a la de Sumika.

Segundos después, Azusa había llegado a su destino.

“¿Qué tal, Murasame-san?” Azusa saludaba gentilmente.
“Pues aquí, esperándote, Aoi-san.” Sumika contestaba sin borrar su propia sonrisa.
“¿Mucho tiempo?”
“Tranquila, no esperé mucho; antes me estaba preparando para recibiros a todas.”
“Estupendo, mejor así que estar sin cuidarse el higiene, ¿no?” Azusa se rió un poco.
“Es decir, que me comprendes, ¿verdad?” Sumika había entendido el punto de la respuesta de Azusa.
“¡Claro que sí! Somos amigas, ¿no crees?”
“Sí, lo somos. Pero antes de continuar con la conversación mejor entremos en mi casa, así no pasaré calor escuchándote.”
“¡Oh, es verdad! Vamos.”

Sumika y Azusa habían entrado en casa, y dentro se podía percibir mejor que había menos calor que en la calle. Cerraron la puerta principal, se dirigieron al cuarto de estar y se sentaron en el suelo, cerca de la mesa para poder tener la conversación tranquila, ya que Sumika estaba cansada.

“¡Vaya, Murasame-san! Se nota que lo pasas mejor en casa que ahí afuera, ¿verdad?” Azusa afirmó.
“¿Eh? ¿Qué quieres decir?” Sumika se mostraba algo confusa por la afirmación de Azusa.
“Digo que aquí hace menos calor que en la calle.”
“¡Ah, vale! Pues sí, es verdad.”

Hubo un momento de silencio, y eso indicaba un cambio de tema para Sumika.

“Oye, Aoi-san...” Sumika murmuró.
Azusa reconoció por el tono de voz de que se trataría de un asunto serio “¿Qué ocurre, Murasame-san?”
“Yo... ¿Conoces algún lugar de trabajo que tenga plazas libres?”
“¿Eh? ¿A qué viene eso ahora?”
“Sinceramente... Estoy sin trabajo, y he ido a tres empresas y no me admitían en ninguno de ellos...”
“¿¿Has visitado tres empresas en un sólo día??” Azusa se mostraba sorprendida.
“No, por Dios, en dos meses he ido a esas tres empresas.” Sumika corrigió.
“Ahhhhh, vale...”
“De hecho, hoy he vuelto de la tercera empresa porque no me admitían allí.”
“Vaya... ¿Y de qué trabajo te ofreciste, por curiosidad?”
“En gestión de negocios.”
“¿Gestión de negocios?”
“Síp, y ni siquiera me habían aceptado, a pesar de haberles mostrado mi currículum vítae... Qué estoy haciendo mal...”

A partir de este punto, la cabeza de Sumika se inclinó hacia abajo; se sentía impotente, por no conseguir trabajo para ganar su propio dinero. Azusa se sentía mal; quería hacer algo por su amiga Sumika y no debería quedarse con los brazos cruzados viendo cómo Sumika se desmoronaba.

Azusa trataba de pensar en algo, una idea, algo que le pudiese animar a Sumika. Y...

“¡Ya sé! ¡Tengo una idea!” Azusa animaba a Sumika.
“¿Qué pasa?” Sumika se mostraba atenta a la idea de Azusa.
“Como bien sabrás, mi familia tiene un negocio en una licorería. Lo que podría hacer es hablar con mis padres de ti y podrías trabajar en esa tienda si aceptan. Quieres hacer gestión de negocios, ¿verdad?”
“Ah... Claro, pero...” Sumika parecía no asimilar la idea con claridad.
“¡Podrías pasarme tu currículum y se lo enseño a mis padres! Además, como eres mi amiga, seguro que aceptarían a primeras. ¿Qué te parece mi idea?”
“Espera-espera-espera un momento...” Sumika quería repasar la idea de Azusa. “Me estás ofreciendo la posibilidad de trabajar en la tienda de tu familia ¿verdad?”
“Sí.”
“Y vas a hablar con tus padres de mí para ver si me aceptan, enseñándoles mi currículum incluso, ¿no?”
“Ajá.”
“Y puede haber más posibilidades de que me aceptan porque soy tu amiga, ¿cierto?”
“¡Exacto!”

Sumika parecía ver claro todo el plan de Azusa. No obstante, antes de llegar a una conclusión, unos golpes en la puerta principal empezaron a sonar. Alguien estaba llamando a la puerta.

“¡Ah! Ésas deben de ser las demás...” Sumika se levantó del suelo para ir a abrir la puerta principal “Seguiremos hablando de esto esta noche, ¿sí?”
“¡Claro! Esta noche.” Accedió Azusa feliz por la idea que tuvo y compartió con Sumika.

Sumika se acercó a la puerta principal, la abrió y se encontró con sus cuatro amigas, y una de ellas fue la razón por la que Sumika sonrió en ese momento. Kazama, Kiyori, Tomoe y Miyako habían llegado finalmente a la casa de Sumika.

“¡Hola, Kazama!” Sumika saludaba primero a Kazama y a las demás “¡Hola, chicas!”
“¡Hola, Sumi-chan!” Kazama saludaba también. Su voz era tan hermosa como su rostro feliz.
“¿Qué hay, Sumika-kun?” Tomoe respondía.
“Venga, pasen, pasen, que fuera hace mucho calor.” Sumika les ofrecía entrar a casa.
“¡Ah, gracias!” Kiyori respondía satisfecha. Por la afirmación se deducía que ella estaba pasando mucho calor fuera.

Las chicas entraron a casa y Sumika cerró la puerta principal.

“Impresionante, Sumika-kun, ¿hay aire acondicionado en tu casa, que es tradicional?” Tomoe comentó.
“Eh... Sí, claro, ¿por?” Sumika respondió.
“Por nada en especial; me parecía un poco raro que una máquina contemporánea estuviese en una casa tradicional.”
“¿Intentas decirme algo, o qué?” Sumika empezaba a perder la paciencia.
“Relájate, era un comentario, no una crítica.” Tomoe aclaró.
“Ah, menos mal.” Sumika se tranquilizaba al instante “Por aquí, por favor.”

Sumika les guió el paso a las chicas hacia la sala de estar, donde estaba Azusa y entraron allí.

“Hola, chicas.” Azusa saludaba.
“¡Hola, Aoi-san!” Kiyori le respondía.

Tras una re-presentación rápida entre las amigas de Sumika, poco después Sumika les traía una bandeja con vasos de té que había preparado durante la re-presentación y lo puso en la mesa de la sala de estar. Cabe aclarar que las amigas de Sumika estaban sentadas en el suelo, rodeando la mesa.

“Espero que les gusten el té que he preparado, amigas.” Sumika aclaró.
“¿Por qué, Sumi-chan?” Kazama preguntó.
“Porque esto es de las pocas cosas que sé preparar sin dificultad... Sabéis que cocino poco...”
“Pero si todo el mundo sabe preparar té. ¿Qué te hace pensar que la tuya es especial?” Miyako respondió franca.

Sumika iba a decir “Porque Kazama está aquí.”, pero eso sería un plan suicida si quería conquistar el corazón de Kazama por las buenas... aunque fuera durante más de 4 años.

“Prefiero no contestar a esa pregunta, Miyako...” Sumika respondió.
“¿Y eso por qué?” Miyako insistió.
“¡Porque no me da la gana, por eso!” Normalmente Sumika no emplea esa clase de respuestas, pero quería dejar el tema.
“¿Y por qué?”
“¡¡Porque no!!”
“Venga, chicas, dejen de pelearse.” Tomoe dijo “Tengo una propuesta para ustedes.”

La afirmación de Tomoe llamó la atención de todas las chicas presentes en la sala de estar.

“¿Qué propuesta?” Sumika preguntó curiosa.
“¿¿Acaso todas lo habéis olvidado?? ¡Me refiero a nuestro proyecto del club de chicas!” Tomoe exclamó.
“Válgame...” Sumika se llevó la palma de su mano a la cara “¿Todavía sigues con eso?”
“¡Esta vez es diferente!”
“¿Por qué?”

Tomoe, en vez de responder, se dedicó a poner en la mesa unos cuantos libros y papeles.

“Miren esto y díganme qué opinan.” Tomoe dijo.

El resto de las chicas cogieron un libro o papel cada una y le echaron una ojeada.

“Esto... Son papeles de una biblioteca, ¿verdad?” Sumika preguntó.
“Sigue leyendo.” Tomoe ordenó.
Sumika empezó a leer. “La bibliotecaria Tomoe Hachisuka ha solicitado la creación de un club de chicas en la biblioteca Sakura...” Los ojos de Sumika se quedaron como platos y no pudo evitar el siguiente pensamiento: “¿Qué es? ¿Una tonta, o una poetisa?
“Sigue leyendo. Hasta el final, Sumika-kun.”
Sumika dio un suspiro y empezó a leer la solicitud... hasta que se paró en un texto que le llamó mucho la atención: “Una vez hecho el club de chicas, se repartirá entre los institutos mixtos para el desarrollo del club...
“¿Qué opinan, chicas? ¿Abandonarán el proyecto del club, o contribuirán su ayuda en el club?” Tomoe propuso.
“¡Sí, me gusta la idea!” Kazama aplaudió la decisión.
“¡Sí, así me gusta, que vaya prosperando el club!” Miyako exclamó.

Entre las presentes, Kazama y Miyako se le veían contentas con lo del club de chicas. Sumika y Azusa se quedaban paralizadas y con cara de “ni de broma está pasando esto...”. Y en cuanto a Kiyori... Bueno, parecía no darle mucha importancia al club, pues apenas reaccionó al texto que leyó Sumika, y que además estaba comiendo un poco de su comida preferida, el pan de curry.

“¿Y tú, Kiyori-chan? ¿Participarás en el club? ¿Nos ayudarás?” Miyako preguntó.
“Bueno, vale.” Respondió la un tanto pasota Kiyori, mientras se centraba en comer.
“¡Bien!” Miyako se giró hacia Sumika y Azusa “¿Y las chicas sosas qué van a hacer?”
Azusa reaccionó al instante, “¡Oye, no soy sosa!”
Sumika decidió aclarar sus conclusiones a la solicitud de la biblioteca Sakura preguntando a Tomoe “Oye... ¿En serio van a repartir publicidad en los institutos mixtos?”
“Correcto.” Tomoe respondió.
“Y la biblioteca accedió a tu petición...”
“Correcto dos veces.”
“Aún haciéndoles saber de qué trata exactamente el club...”
“Correcto tres veces.”
“Y en serio lo van a hacer...”
“Correcto cuádruple.”
“Ah, no hay chicos en la biblioteca de la que trabaja Tomoe, no hay ninguno.” Miyako añadió.
“Y gracias a eso, las posibilidades de que hayan aceptado mi solicitud aumentaban.” Tomoe dijo.
“Venga, anímate, Sumi-chan. Recuerdo que me dijiste que te encantaban las chicas.” Kazama animó.

(Nota del autor: referencia al capítulo 4 del anime)

“¿Murasame-san...? ¿Es eso cierto...?” Azusa preguntó, confusa.
“Ya... Ya te lo explicaré luego...” Dijo Sumika en voz baja, y seguidamente respondió en voz alta, intentando disimular “¡Venga, vale! ¡Haremos el tal club de chicas!”

4 comentarios:

  1. Puse el nombre de la biblioteca "Sakura" por una especie de homenaje al anime de Sakura Card Captor (que por cierto, lo estoy viendo y ni siquiera me lo he terminado); además de que no se me ocurría ningún otro nombre apropiado para una biblioteca de sólo chicas.

    ¡Espero que el tiempo que os hice esperar haya merecido la pena! ^^

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  2. siari:...

    hola ^^
    aqui andamos xD
    me gusta el anime
    y me gusta tu fic
    ojala ecribieran mas

    salu2
    sayonara :D

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  3. Jeje bueno si, 4 años son 4 años.

    Venga te propongo algo, hace un par de días envie la solicitud a Fanfiction para que crearen la categoria de "Sasameki koto" y... ¿adivina?....Si, ya esta disponible. como no se ha publicado ningun fanfiction no aparece en el sistema de busqueda pero a la hora de publciar aparece clasificado. ¿Que te parece ser el primero el publciar?, porque yo me meti en dos proyectos más mas lo que tengo quedado....en todo caso, te propongo eso.

    Puedes llevar la historia atrasada en fanfiction si quieres, mas ventana para la historia.

    Me gusto el capi, sobre todo la aprte final. Ya quiero ver a Sumika explicandole a Aoi lo de su gusto por las "chicas" (osea solo kazama) con Miyako tratando de sabotearla para q' confise del todo.

    Espero el proximo capi.

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  4. @Valkirye: Eres la segunda persona que me pide que suba mis Fan Fictions a Fanfiction.net, ¿sabes? =)

    Agradezco tu generosa oferta, pero prefiero que la sabiduría de mis actos y palabras hable por sí sola. ^^

    Aunque podrías hacer una cosa, si quieres ayudarme, claro. Podrías contarle este Fan Fiction a tus amigos/as que son fans del Yuri y del anime. ¡Seguro que lo visitarían a primeras! =D

    Y si no, siempre queda la opción de compartirlo mediante Facebook, un foro... etcétera. xP

    Ahora mismo estoy haciendo el siguiente capítulo. ¡Deséanme suerte todos/as! =D

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